Este fin de semana tuve una reunión con una pareja llena de mucha buena vibra y luz ambos están super involucrados en la boda. Durante la reunión surgieron algunos temas donde hice algunas recomendaciones acerca de la logística y su respuesta fue: “nos dejamos guiar y confiamos” y agradecí infinito la confianza ya que eso nos permite hacer super equipo, finalmente como planner el objetivo es que todo salga perfecto y ustedes puedan disfrutar cada momento de su boda. Así que, si estas en proceso de planeación de boda confía en la experiencia de tu wedding planner y de tus proveedores y déjate llevar.
Te dejaré algunas razones para confiar en tu wedding planner:
1. Por su experiencia, profesionalismo y conocimiento.
Cada
boda que se coordina y planea es una experiencia nueva y de todas las bodas se aprende
algo. La experiencia sin duda alguna será un factor determinante, no solamente
en la planeación de tu boda sino en el manejo de los contratiempos y las
respuestas eficaces y oportunas para situaciones complejas. Conocen los
protocolos y después de varias bodas la mayoría de las veces saben que es más funcional
para el gran día; además de que se preparan constantemente para dominar las
tendencias.
2. Sera tu confidente.
La mayoría de las WP logran generar tal empatía y vínculo con los novios que incluso termina en amistad pues tienen en sus manos el gran día: “TU BODA”. Además, son quienes estarán junto a ti en este importante proceso, literal le abrirás las puertas de tu casa y tendrán que conocerte lo más a fondo posible durante el proceso de planeación, ya que no sólo es organizar una celebración, sino crear una experiencia a la medida plasmando la personalidad de los novios, también tendrá la tarea de transmitirte toda la tranquilidad y seguridad que necesitas para saber que el gran día será tal cual lo soñaste.
3. Por su amor a la profesión
Creo firmemente que la clave del éxito en cualquier profesión, está en la pasión que se tiene por lo que haces, en el amor y sobre todo en la dedicación. Planear una boda puede ser algo demandante, pero es muy muy GRATIFICANTE; se involucran muchísimas emociones y se generan lazos increíbles.
